Tlacos

Apenas me hice de un libro que me pareció genial. Delicias de antaño, historia y recetas de los conventos mexicanos se llama, editado hace unos años por BBVA Bancomer. 

En el he ido encontrando recetas geniales a la manera de antes, cuando se cocinaba con pizcas, puñitos, tantitos y ojitos. 

La primera que me llamó la atención son estos deliciosos panes de pulque. 

La receta tal como aparece en el libro va así:

Tlacos

Son panecitos ovalados de pulque. Se hacen con cuatro tazas de harina cernidas con una cucharadita de sal, la cual se mezcla con tres cucharadas de manteca (que puede ser vegetal), y medio litro de pulque dulce. Se hace una masa que se trabaja hasta que se separa de la tabla. Se unta una batea con manteca, se pone la masa, se tapa con un lienzo húmedo y se deja reposar en un lugar tibio durante unas tres horas. Después, se forman los panecitos de forma ovalada y se dejan reposar en una charola de horno engrasada con manteca, y se meten en el horno precalentado a 200 C más o menos durante 20 minutos. 

Se les llamaba tlacos por su parecido a una moneda ínfima de cobre que equivalía a la octava parte de un real de plata, o la mitad de una cuartilla. Tlaco es una palabra náhuatl, que significa medio o mitad.